Los pitbull son perros que han sido estigmatizados por los humanos como animales agresivos, durante años han sido entrenados para que entren en el negocio ilegal de las peleas de perros y ahora los rechazan. Pero la verdad es que no son animales agresivos, todo depende de la manera en que los hayan criado. Entrenarlos para que sean agresivos no es lo único que tienen que vivir, también obligan a las hembras a reproducirse, ya que los cachorros pueden ser muy valiosos.
En Virginia se ha llevado a cabo un proyecto llamado Gracie’s Guardians, una iniciativa de Richmond Animal League, que ayuda a los dueños de perros pitbull a cuidar de ellos y a cubrir los gastos de sus necesidades. En esta ciudad es legal que los perros permanezcan atados en el exterior siempre y cuando tengan, agua, comida y un refugio adecuado.
Pero cuando llegaron al lugar donde vivía June y los otros perros, notaron que no cumplía con esos requerimientos.
Además, los perros estaban en un patio cubierto de nieve cuyo único refugio era una vieja lona inservible donde se escondían, se trataba sin duda alguna de un caso de maltrato animal, por lo que el grupo de personas que representaban a Gracie’s Guardians donde participaba Grace, lograron rescatar a dos de los perros que se encontraban en el lugar.
Sin embargo, una escena quedó en la mente de Grace y ella sabía que tenía que hacer algo.
El hombre tomó a June y la alzó por la piel demostrando que no era agresiva, luego la soltó de manera violenta y la perrita lo único que hizo fue gritar. Así que Grace volvió por ella, junto a control de animales y decidió hacerse cargo de ella durante el tiempo que fuera necesario; June estaba en muy malas condiciones e inmediatamente fue llevada al veterinario.
Ella tenía mas de 8 años, sufría de mastitis y una hernia en su abdomen, signos de que se reprodujo muchas veces.
Esos no eran sus únicos problemas, también estaba muy por debajo del peso de un perro de su raza, sus orejas habían sido cortadas, una de ellas parecía haber sido arrancada probablemente en una pelea con otros perros por alimento, su cola estaba quebrada y tenía la enfermedad del parásito del corazón. Ella había sufrido mucho, pero increíblemente era una perrita muy noble y al darse cuenta de que ya no tendría que luchar más por alimentos, comenzó a mejorar.
Pronto comenzó a subir de peso y estuvo lista para las cirugías que necesitaba y su tratamiento para el parásito del corazón.
A pesar de que ella siempre había vivido en el exterior, se adaptó rápidamente a vivir en el interior de la casa; de hecho, trataba de permanecer siempre junto a alguien cuando salían al patio asegurándose de que no la abandonaran nuevamente. Muy pronto ella estuvo completamente sana y una familia la llevó a su hogar para cuidarla, ellos tenían dos pitbull con los cuales June se adaptó muy bien.
Ella no ha dejado de mostrar su personalidad amorosa y cada vez es más amable.
Puedes ver lo hermosa y cariñosa que es en este video:
A pesar de su horrible pasado, June no guardó rencores; al contrario, ella ama a la gente y le encanta acurrucarse con quien esté dispuesto a abrazarla, siempre está meneando su cola y nunca se pone de mal humor. Es maravilloso ver su transformación y saber que hay personas dedicadas a devolverle la alegría a animales que han tenido una vida dura y llena de maltratos.
No dejes de compartir la historia de June y apoyar a los proyectos como Gracie’s Guandians.